¿Qué pasa si la chica dura ya no es tan dura?
¿Si ha dejado que sus sueños se apoderen de ella, y su razón haya perdido las riendas de su vida?
¿Y si la capa de hielo que cubría su corazón se ha derretido?
¿Qué pasa si por primera vez no es capaz de descifrar a alguien?
¿De qué le sirve ahora ser observadora?
¿Qué pasa si todo lo que el mundo le dice, le parece contradictorio?
¿Y si ese mundo contradictorio en el que vive, corrompe sus pensamientos,
invade su alma y metamorfosea su mente?
¿Qué pasa si necesita algo más?
¿Si ha cambiado su forma de ver las cosas?
¿Y si su lucha fuera ahora consigo misma, en vez de contra el mundo?
¿Qué pasa si su misterio se resolviera con... un pedacito de ella perdido, y que alguien encontró en el bazar de los besos?
Es como si se hubiera encontrado toda su vida perdida, y cuando descubre la salida de su laberinto, le da miedo adentrarse ante lo desconocido. Puede que ella solamente haya conocido lo simple, y que por primera vez se quiera enfrentar al reto de conocer algo que le resulta tan complejo que le aterra adentrarse en la aventura de sus sueños, por miedo a equivocarse...
Porque... ÉL es el príncipe de sus sueños, y el monstruo de sus pesadillas
~Literal